LIEJA - BASTOGNE - LIEJA CHALLENGE
" El secreto de mi felicidad está en no esforzarse por el placer sino en encontrar el placer en el esfuerzo" André Gide.
"Es la clásica más bonita del calendario", le decía Michele Bartoli, dos veces ganador de la Lieja - Bastogme - Lieja a Procycling a finales de los años 90. "Es la única carrera en la que puedes estar seguro de que los ciclistas que suben al podio están ahí porque eran los más fuertes. Hay otras carreras en las que la astucia puede suplir la falta de fuerzas, pero no en Lieja. En Lieja, lo más importante es la fuerza bruta, pura y dura. La táctica no importa tanto" (Monumentos. Pasión y gloria de las grandes carreras de un día.- Peter Cossins)
La Lieja-Bastoña-Lieja (en francés: Liège-Bastogne-Liège) es una carrera ciclista profesional belga que se disputa en Lieja y sus alrededores y como su propio nombre indica pasando por Bastoña, el último domingo del mes de abril.
Es una de las cinco pruebas clásicas conocidas como "monumentos del ciclismo", junto a la Milán-San Remo, el Tour de Flandes, la París-Roubaix y el Giro de Lombardía, siendo la más antigua de ellas. Su primera edición tuvo lugar en 1892 y por ello es conocida como La Doyenne ("La Decana"). Hubo algunas de sus primeras ediciones que no fueron para corredores profesionales.
La carrera suele tener una longitud media de unos 260 km, atravesando las colinas de las Ardenas donde las cuestas y el tiempo impredecible hacen más dura esta clásica.
La prueba tiene durante todo su recorrido numerosas cotas o puertos, siendo una decena de ellos puntuables. Tradicionalmente, en los últimos 35 km, casi siempre han sido: La Redoute, Sprimmont , Sart-Tilmar, Saint-Nicolas y Ans (wikipedia) .
El año pasado hicimos la "París - Roubaix" (aquí la crónica) en nuestro particular objetivo de hacer los 5 monumentos del ciclismo.
La verdad es que se disfruta mucho el poder hacerla rodeado de amigos. Un viaje se vive tres veces: Cuando lo soñamos, Cuando lo vivimos. Cuando lo recordamos.
En esta ocasión decidimos alquilar una Autocaravana y fue todo un acierto!
Lieja está a 1.600 km de distancia de Madrid. Salimos el jueves por la tarde y nuestra idea era ir turnándonos en turnos de dos (uno conduce y el otro le da conversación) que rotábamos cada 2 horas. En general, las idas se hacen más amenas que las vueltas porque no paramos de hablar y el tiempo pasa rápido.
Como curiosidad, señalar que paramos a desayunar cerca de la escultura de Jabalí más grande del mundo. La región de las Ardenas, en Francia, homenajea desde hace años la figura del jabalí "como símbolo de paz" con una gigantesca escultura cuyo autor, Eric Sleziak, tardó once años en construir. La impresionante obra mide catorce metros de largo, tiene diez metros de altura y pesa cincuenta toneladas.
Llegamos con tiempo suficiente para coger los dorsales y comer algo en un restaurante cerca de la salida.
Luego dimos una vuelta por la ciudad, cenamos y nos acostamos pronto que al día siguiente tendríamos que meternos casi 260 km con 4500 m. de desnivel para el cuerpo.
Estuvo lloviendo toda la noche y seguía lloviendo cuando nos levantamos. La verdad es que el día amanecía de lo más desapacible, pero como dicen "al mal tiempo, buena cara".
Todo el recorrido es un interminable "sube - baja", pero los primeros 100 kilómetros son los menos duros. A partir de ahí es donde se encuentran los "muros" que hacen que muchos hayan definido esta carrera como la prueba ciclista de un día más dura del mundo.
Estos primeros kilómetros transcurren con tranquilidad, sobre todo por que quedan muchos kilómetros y está lloviendo y hace frío.
A partir del kilómetro 130, cuando nos encontramos mas o menos en el ecuador de la carrera, empezamos a notar el cansancio en nuestras piernas. Se agradece que la organización haya previsto avituallamientos cada 50 kms.
A partir del último avituallamiento y a falta de unos 50 kms para la meta, decidimos que el que quisiera "apretar" podía hacerlo. La verdad es que íbamos todos con las fuerzas muy justas, pero Iván era el que mejor se encontraba. También es el más joven je,je.
Tengo que reconocer que los últimos kilómetros se me hicieron especialmente duros y luego analizándolo en frío, sé que fue debido a dos errores que cometí. El primero no comer lo suficiente y eso era porque con los guantes de invierno no podía sacar los geles ni las barritas del maillot. Y el segundo va relacionado con esto y es que tenía que haber diluido unos geles en el bidón como hago en los Ironman.
Es verdad, que es una cicloturista y que la idea era ir a disfrutar y no competir, pero estamos hablando de que si para los profesionales es una de las más duras del mundo, es lo mismo para nosotros, ya que hacemos el mismo recorrido.
La prueba es espectacular y se pasa por algunos de los "muros" más famosos del ciclismo épico. De entre todos, el más espectacular y donde los profesionales aprovechan para lanzar sus ataques es "La Redoute".
"La côte de la Redoute, situada en el extremo norte de Remouchamps y que avanzaba en paralelo a la autopista E25, que había sido abierta al tráfico hacia poco con el objetivo de unir Lieja con Luxemburgo. Tiene una pendiente media del 9,5% durante 1,7 km con una media del 12 durante los últimos 700 metros, cuando la carrera pasa junto a un memorial que marca el lugar en qué sucedió la batalla de Sprimont, donde los franceses derrotaron a los austriacos" (Monumentos. Pasión y gloria de las grandes carreras de un día.- Peter Cossins)
Los últimos kilómetros seguían transcurriendo entre la intermitente lluvia y el cansancio, pero también era consciente que era un afortunado de poder estar en las mismas carreteras donde se habían escrito algunas de las más mas bellas páginas de la historia del ciclismo.
Estaba inmerso en estos pensamientos cuando llegó a mi altura Diego, que había sufrido un bajón. Por delante y a la vista en algunas subidas, llevaba a Edu y Pablo. Le pregunté a Diego cómo se encontraba y me dijo que "con ganas de llegar", le dije que llegaríamos juntos.
Una de las cosas que más me gustan de estas pruebas es hacerlas con amigos. No es cómo en las competiciones, dónde el objetivo es llegar lo más adelante posible. Aquí, desde mi punto de vista, el enfoque debe ser más el de disfrutar dentro de su dureza, pero teniendo tiempo para disfrutar de la compañía y el paisaje.
Por fin la ansiada meta, después de más de 258 kms y 4.500 metros ascendidos (mi récord de metros ascendidos en un día. Poco más de la mitad que el Everest).
Ha sido toda una aventura y un placer poder compartirla con Diego, Pablo, Edu e Iván. Grandes deportistas pero mejores personas.
Han sido días de ciclismo épico, pero también de vivir momentos únicos que nos hacen personas más ricas en el sentido más amplio del término. "El dinero hace personas ricas, el conocimiento hace personas sabias, pero la humildad hace grandes personas"
Ya en el viaje de vuelta estábamos planeando nuestro próximo "Monumento" para el año que que viene. La Milán-San Remo. El evento ciclista amateur con más kilómetros del mundo. 296 km. ¿Quién dijo miedo, habiendo hospitales" je,je.
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